Debí besarte...

Debí besarte, desde la primera vez que te vi debí besarte, como lo deseaba y como aún lo deseo, ese era nuestro camino y no lo tomé que tonto soy, te dejé ir de tormento en tormento por no besarte, te dejé sufrir y llorar por ser un cobarde y no besarte, lloré porque te dejé con los labios tibios y deseosos de los míos, lo vi en tu mirada y tú en la mía y no lo hicimos, pasaron los años y un buen día me rataste: "¿qué no me vas a besar? Me dijiste, escuchando a mi banda favorita me hiciste una invitación que no pude rechazar y por fin lo hice!!! Te besé y te besé mucho! Fundimos nuestras almas y nuestros cuerpos en deseo y atracción, hicimos el amor! Fuiste mía y yo fui tuyo! Fue la noche perfecta... Pero era tarde! Sabía que ibas a regresar a sus brazos y yo a los de ella, que ese amor intenso, real, gigante y hermoso, era efímero. Y volvimos a sufrir en los brazos que son ajenos, que son fríos que nos lastiman y nos hacen sufrir... Y hasta nuestro próximo encuentro pertenecemos en ellos, lastimosamente no eres mía eres de él no soy tuyo soy de ella, pero en el fondo siempre seremos nuestros, déjalo y yo la dejaré...huye conmigo y empecemos la vida que soñamos, la vida que merecemos, déjalo!! El no te ama como yo!

No eres la mujer de mis sueños,
Nunca soñé que pudiera existir tanta belleza en una mujer tan hermosa
Nunca soñé con una mujer tan mágica y que volviera la magia real
Nunca soñé con una mujer a quien dejara ver tan dentro de mí y no se asustara de muerte
Nunca soñé con una mujer tan indecentemente humana que me hiciera ver la belleza del mundo otra vez.
Nunca soñé con una mujer tan exquisita, inteligente, sensual, inocente, mala, buena, capaz y linda.
Nunca soñé con una mujer tan desafiante que me exigiera a ser mejor persona sin siquiera saberlo
Nunca soñé con una mujer oscura que tuviera tantos colores
Nunca soñé con una mujer tan sexy y tierna al mismo tiempo
Nunca soñé con alguien que viera belleza en mis defectos
No, nunca soñé contigo porque no podría soñar con alguien tan extraordinario y aunque ahora sueño diario contigo no te puedo soñar tan perfecta!

No eres la mujer de mis sueños eres la mujer de mi realidad y te adoro!

En los momentos más felices de mi vida escucho el eco de tu risa
Y en la oscuridad me ilumina la luz de tus ojos.

Al oscurecer lo refulgente de tu partida me ciega
He estado aquí sollozando
Aún no encuentro paz.

En el silencio el clamor de los fantasmas de tu abandono me desgarran los oídos
El alivio no llega

Quédate en la distancia de tu indiferencia, porque tu presencia me matará de peor manera que el dolor de ausencia.